Despues de Lucia

"Después de Lucía" es una película sobre una adolescente que es víctima de los bullies en su escuela, pero la manera en como la molestan va mas allá de lo bully y se convierte en una tortura mental y sádica por un grupo de jóvenes que no parecen tener consciencia alguna. Este problema con el que se enfrenta la sociedad hoy en día es muy serio y sucede en todas las edades, pero es muy diferente cuando sucede entre niños de primaria que aun están diferenciando entre el bien y el mal a cuando sucede con adolecentes que saben hacer la distinción y aun así deciden torturar a la otra persona. Mientras veía la película me ponía a pensar, "¿Donde está lo divertido en hacerle eso a otra persona?". Entiendo cuando alguien le encuentra lo bueno a las drogas ya que es una adicción, y tal vez lo es también con bullying, pero es desesperante como estos individuos no están conscientes del daño que le hacen pasar a esta persona.

La película cuenta la historia de Alejandra, la adolescente, y su papá, quienes se mudan al D.F. desde Puerto Vallarta por cuestiones laborales. Ambos están lidiando con la pérdida de su esposa/madre, quien murió en un choque automovilístico. Ambos lidian con esto de distintas maneras, pero el que no parece sobrellevarlo serenamente es el padre, quien ha perdido noción de las cosas y no tiene motivación alguna. Alejandra llega a su nueva escuela, conoce a varios compañeros y desarrolla una amistad con todos. Una noche de fiesta tiene relaciones con uno de ellos, el muchacho saca su cámara y lo deja grabando todo, ella lo sabe y no parece molestarle. Al día después el video es subido a la web y toda la escuela lo ve y aquí es cuando empieza la tortura, especialmente por los amigos de ella. Es tanto el odio que surge la duda si acaso ese fue el plan desde que la conocieron, y si es así ¿Que hizo la pobre muchacha para merecer eso? Irónicamente el único que no la molesta es el mismo muchacho con el que tuvo relaciones, es obvio que él subió el video, pero parece ser el único que tiene una consciencia al respecto. Los jóvenes de esta película son niños privilegiados, lo cual es simplemente una manera más sofisticada de decir que son niños fresas. Yo he convivido con ese ambiente, y debo decir son las personas que más se ofenden entre ellos mismos por diversión.  Una cosa es carrilla y otra es ser ofensivo. Estas personas no parecen saber la diferencia. Día tras día la torturan a la pobre, pero llegó al punto en el que casi gritaba a la pantalla "¿Dile a tus maestros?". De hecho llega un momento en el que se pelea con uno de los bullies, a ambos los llevan a la dirección, pero ella decide mentir al respecto y proteger al bully ¿Por qué? ¿Por miedo a que se revelara lo que pasó en aquella fiesta? Uno pensaría que esta fuera una película en la que vemos a la niña llorando todo el tiempo, pero de hecho nunca derrama una sola lagrima, sino, mas triste aún, se lo guarda todo. Es claro que la están matando las humillaciones por dentro, pero permanece firme y sin decir nada. Casi al final llega al punto en el que ya no cuestiona ni reniega cuando los bullies le dicen que hacer, solo lo hace para que la dejen en paz. Por otro lado tenemos al padre, quien, a pesar de que nota un cambio de actitud en su hija, no tiene idea de que es lo que esta pasándole ya que se encuentra lidiando con sus propios conflictos. La muerte de su esposa lo ha afectado de tantas maneras que es claro que el señor en cualquier momento va explotar, lo cual llega a suceder en distintas ocasiones, tales como la escena en la que se agarra a golpes en la calle con un taxista por haber estado cerca de chocarle (Tenía que ser taxista).

El director, Michel Franco, aplica el mismo estilo que Fernando Embicke aplicó en "Temporada de Patos" en cuanto el hecho de que no hay movimientos de cámara de ningún tipo. Vemos toma fija tras toma fija durante toda la película. Al principio este estilo le da un ritmo lento, lo cual también se debe a que las tomas duran un largo rato, pero mientras más se complican las vidas de estos personajes es más y más intrigante, de esas películas que ocupas saber que va a pasar. Una película de este tipo sería ideal para cualquiera de aquellos cineastas mexicanos que les encanta mostrar tragedia y tristeza, pero Franco no es uno de ellos ya que a pesar de que es triste lo que le pasa a la muchacha, no lo sobre hace al agregarle más y más problemas hasta sobrecargarlo. Ser víctima de un bully es problema suficiente que ha acabado de maneras muy trágicas. Cualquier otro cineasta hubiera puesto al papá como un villano desconsiderado para hacerla más depresiva aún, pero no, el papá la quiere, la comprende, y le tiene paciencia a su hija ya que es lo único que le queda ahora que perdió a su esposa. Si el papá hubiera sido un villano hubiera sido una historia difícil de ver, hay un límite a que tanta tragedia podemos tolerar hacia un personaje.

Un detalle que me llamó la atención de manera muy individual fue la calidad técnica, no es común que veamos una película mexicana independiente grabada en formato digital y que sea tratada como tal. Si no supiera que se trataba de una película que tuvo distribución en salas de cine yo hubiera pensado, al ver las primeras imágenes, que se trataba de un trabajo hecho en la localidad, y todos sabemos que %99.99 de trabajos que se hacen aquí son echos con un presupuesto microscópico. De hecho algunas de las escenas que se llevan a cabo en la escuela me recordaron al intro de mi largometraje "BUENOS TIEMPOS". Otra similaridad con los proyectos locales es el audio, aquel aspecto cinematográfico que le falla a todo proyecto que se han hecho aquí, incluyendo los míos. Hay muchas ocasiones en las que no es claro que dicen los personajes y le tuve que regresar para tratar de entenderles. Afortunadamente, hay poco dialogo en la película, así que no se nota este problema con tanto cinismo. También me sorprendió muchísimo como no hace el más mínimo intento para ocultar que fue hecha con una cámara digital en un país que no se quiere soltar del celuloide, el cual eventualmente se va acabar. Esto me motiva porque demuestra un poco más de tolerancia hacia proyectos nacionales de este tipo, pero la guerra de formatos continuará mientras el celuloide siga existiendo.

Algo que me decepcionó bastante fue como terminó la película. Para cuando llegamos al tercer acto la película llega a un punto de suspenso e intriga tan alto que es decepcionante y sumamente repentina en qué momento la pantalla se pone toda negra y el filme acaba. Hay muchas cosas que no que me hubiera gustado que se hubieran resuelto ya que no son los detalles de la trama que pueden fácilmente dejarse sin resolver para dejarlo todo en misterio, pero el hecho de que nos haya enganchado de esa manera es algo que no vemos muy común en el cine mexicano.