Mickey en acción!

El Café Revolver es como el café del pueblo…TODOS LE HAN DADO…fama en sus cortos. Lo que quiero decir es que varios realizadores locales hemos grabado dentro y/o fuera del lugar.

Yo grabé en el café el año pasado una escena de “Cenizas Quedan”. Aarón Soto también grabó para su más reciente cortometraje llamado “Uptown”, el cual se lleva a cabo en los 80’s (Aunque será difícil para mi aceptar que se está llevando acabo en los ochentas al estar viendo el REVOLVER en la pantalla!), y nuevamente grabé este año en el café para mi documental del cine en Tijuana, al cual por cierto llamaré “Séptimo en la Frontera”. Sin embargo, el Bezeta fue quien nos dejó a todos con la boca abierta al grabar dentro del café un miércoles a las 10pm, después de que el lugar había cerrado, convirtiéndolo en otro tipo de lugar y no dejarlo que apareciera como lo que es, un café. En que lo convirtió? No puedo revelar, normalmente lo haría si no fuera por que una de las participantes suplicó que no se revelara nada sobre la escena.

Fue difícil grabar a esa hora, especialmente para Julio, Viridiana, Brenda, y Mickey ya que ellos tenían clases al día después. Bueno, en realidad la grabación comenzó mas tarde, como a las 11 pasadas, ya que teníamos que mover sillones y acomodar props para la escena, aparte a Mickey se le ocurrió improvisar una escena con Julio, la cual al terminar decidió NO incluir en el corte final, pero a final de cuentas se las ingenió para incluirla.

A las 12am la cosa se puso un poco tenebrosa, ya que justamente cuando comenzaríamos a grabar, alguien tocaba la puerta del café, a pesar de que estaba cerrado. Nos asomamos por debajo de la reja y veíamos unos pies, pero nunca de quien. Viridiana, una de las participantes, se ponía nerviosa, y sus nervios eran contagiosos. Mickey decidió comenzar a grabar nuevamente, y nuevamente tocaron la puerta. Esta vez lo ignoramos y seguimos con al escena, hasta que de repente “TRACK!” escuchamos un golpezote en la reja que nos hizo brincar a todos del susto. Después de eso, Julio se puso en la puerta, vigilándola. Para esto, todos estábamos aterrados ya que nos poníamos a pensar que estábamos en la madrugada en plena zona céntrica. Es peligroso.

Saben? me estoy poniendo a pensar ahorita, mientras estoy escribiendo esto, que la última vez que estuve en una grabación con Julio y Mickey (La vez de “Pares” en la presa) también estábamos aterrados por algo. Aparentemente es algo por lo cual tenemos que pasar juntos para hacer un corto.

Pero afortunadamente, después de ese pequeño incidente, todo siguió normal, la grabación continuo a buen paso, y felizmente terminamos.

Esta es la primera vez que veo a Mickey trabajar, y fue todo un enigma. Nadie de los presentes sabíamos exactamente que es lo que estábamos haciendo, nisiquiera las participantes, o sea, obviamente sabían que tenían que hacer en la escena, pero no a que llegaría. Hasta este día no lo saben. Es un misterio ayudarle a alguien a hacer un corto y no saber que es lo que estamos ayudando a hacer, lo mismo pasó en “Pares”, no tenía idea de lo que estábamos haciendo, pero en Julio confiamos y a él seguimos. Lo mismo pasó aquí, Mickey sabe lo que esta haciendo, y como buenos colegas y amigos lo único que tenemos que hacer es seguirle la onda, ayudándole, apoyándolo. Valdrá la pena todo el trabajo? No lo sabemos, y francamente no importa.