Unfinished Bussiness: Exponiendo mis cortos en la Lázaro


"Mi trabajo en la Lázaro, ahora sí, por fin, ya terminó
ya hice algo que siempre quize hacer
no tengo mas que hacer o decir respecto a esto
ya quedé en paz con la Lázaro.
Y bueno, estando aquí me recordó muchas cosas
pero en cuanto los cortos ya todo ha terminado
ya lo dejamos por la paz
ahora sí, me despido de la Lázaro."

Con estas palabras me retiré de la Preparatoria Lázaro Cárdenas después de haber expuesto dos de mis cortos frente a seis o siete de grupos de 4to y 6to semestre. La exposición no se hizo frente a todos a la vez, sino repetidamente de uno por uno. Una noche antes hablaba con mi novia de este evento, y le comentaba que sentía que no hiba a ser algo programado, pensaba que solo iba a ser una exposición organizada por alumnos sin el respaldo de ningún maestro. Pero no tenía idea de lo equivocado que estaba.

Una cosa es que el público asista voluntariamente a una exposición de cortometrajes con el único objetivo de verlos, y otra muy diferente es que el público asista por que sus maestros los llevan casi a la fuerza. Este fue el caso en esta exposición, sin embargo, debo admitir que había jovenes que realmente se enfocaban en los cortos. Aunque en cada grupo había uno, dos, hasta cinco personas que eran los típicos "payasitos" del grupo que se la pasaban gritando, bromeando, y en una de las presentaciones le gritaban a los personajes de los cortos diciéndoles que hacer. Mi cuñada y yo ibamos juntos en la prepa, y al contarle esto nos pusimos a pensar quienes, de nuestro antiguo salón, se hubieran comportado de la misma manera, y en efecto si pensamos en dos (Para los que hiban con nosotros en la prepa, serían el Robert y el Mini me). No me importa lo que griten o de lo que se burlen, lo que me molesta es que contaminan a los demás y no los dejan concentrarse en lo que están viendo. Pero bueno, mas adelante les cuento como lidié con dos de ellos. La alarma suena a las seis de la mañana, lo cual es un alivio para mí por que yo estoy acostumbrado levantarme a las 4am o a las 4:30 am, me levanto, me cambio, caliento el carro, y a las 6:30am ya estaba en camino. Diez minutos después llegué al estacionamiento, el guardia me pregunta a que hiba y le dije que venía a una exposición de cortometrajes. Ahora, aquí si me puse algo tenso por que como pensaba que esto fue organizado por alumnos solamente y no por maestros, pensé que no me dejarían pasar. El guardia me dijo que me estacionara cerca en lo que autorizaba mi entrada, osea, aseguraba si realmente había una exposición a la audiovisual. Cinco minutos pasarón y finalmente me dejó pasar. Entré a la Lázaro y por cualquier lado que pasaba me venían imágenes a la mente, recuerdos, remembranzas de cosas que hice o cosas que no hice y debí haber hecho. Sentía las miradas de todos a pesar de que nadie, creo yo, me estaba viendo, tal vez por que me sentía como un extraño, ya no soy alumno, y el ambiente es similar, pero al mismo tiempo, de alguna forma, diferente.

Llegué al audiovisual, eran las 6:45am, había llegado temprano ya que se me informó que todo empezaría a las 7am, pero yo siempre he preferido llegar temprano a llegar tarde. Esperé, esperé, y esperé. Como a las 7:10am llega la muchacha y ambos pasamos a la sala para ir preparando todo, pero el encargado dijo que no podía hacer nada sin el profesor presente, y fue aquí cuando se me informa que sí había un maestro encargado del evento, y era nada mas y nada menos que el profesor Enrique Briseño, quien me enseño teorías de comunicación en 6to semestre. El era un maestro con el que llegué hablar de cine, y le llegué a comentar lo interesadísimo que ya estaba desde aquel entonces. Después de muchísimo tiempo lo volví a ver, lo saludé, y fue aquí donde se me informó que diez grupos estaban programados para ver los cortos. Resulta que el maestro y la muchacha encargada habían hablado con distintos maestros acerca de la exposición, y gran parte de ellos dieron autorización para que sus alumnos asistieran. El detalle es que, como dije anteriormente, no iban a ser todos al mismo tiempo, sino uno por uno.

José Paredes y el Profesor Enrique Briseño

Llegó el primer grupo, pero desafortunadamente perdimos mucho tiempo en acomodar todo el equipo y en ir por ellos, debido a esto, el equipo solo tendría tiempo de ver uno, el cual sería "Abuso al Arte". Todos los alumnos estaban sentados, yo y el profesor Briseño pasamos alfrente y le dimos la bienvenida a todos. Estaba nervioso, pero la introducción del profe me relajaba un poco ya que hablaba del cine de una manera analítica y se notaba que en realidad causaba interés en los jóvenes, los cuales no tenían idea de lo que iban a ver, ni mucho menos que tenían que hacer.

Las luces se apagaron, todos se callaron, y la función comenzó. Mientras se proyectaba yo solo observaba a los alumnos, observaba sus reacciones, sus comentarios que hacían entre ellos, y no recuerdo que en este grupo haya habido un "payasito", de hecho me gustó mucho la manera en que manejaron la exposición. El profesor Briseño se me acercó como a la mitad del corto diciéndome lo mucho que le gustó la combinación de música que hice, y esto es algo que mencionó en todas las introducciones que dimos a los demás grupos que siguieron, cada vez con mas detalle y pasión. Pero bueno, no me adelanto.
El corto se acabó, y decidimos mostrar lo que alcanzáramos de CUARTO antes de que tocara el timbre, pero no fue mucho tiempo, solo vieron como los primeros 4 o 5 minutos cuando tocó el timbre. Los alumnos le pidieron al profe que los dejara quedarse, pero el problema era que eran de 6to, y todos los alumnos de este semestre tenían que presentarse de inmediato al gimnasio por que hiba a haber una asamblea.
El segundo grupo entrando a la sala

Se retiró el primer grupo, y me gustó bastante que realmente hayan observado sin hacer bromas no tanto del corto, sino del hecho de estar viendo un corto. Tenía la idea de que el siguiente grupo también iba a ser así, pero fue totalmente lo contrario. Tenían un relajo, tan grave que algunos seguían hablando hasta cuando me les paré alfrente a darles la bienvenida. Parte de la razón por la que esto sucedía era por que no venían con ningún profe, y el profe Briseño no estaba por el momento. Pocos de la mitad estaban realmente interesados en ver los cortos, pero los demás no paraban de hablar y de bromear. Especialmente dos que los estaba viendo desde atrás, fueron estos dos jóvenes quienes les gritaban a los personajes de los cortos, "Ten cuidado morro!", o hacían preguntas como, "Ese huey es matón?!". Al final de la proyección llegó el profe Briseño, y de nuevo, ambos nos paramos alfrente a hablar respecto los cortos. Cuando tocó el timbre y todos se habían levantado para irse, los detuve y les dije, "Una última cosa, durante la proyección de los cortos, un joven estaba gritándole a los personajes. Pues sea quien sea, quiero informarle que todo está grabado y no te pueden escuchar", todos rieron excepto, por supuesto, el jóven.

José Paredes y el profesor Manuel Morales


El tercer grupo vino acompañado por mi querido y estimado ex-ascesor, el profesor Manuel Morales, quien también se paró alfrente de todos, al lado mío y del profe Briseño, para dar la introducción, y brevemente les contó acerca de cuando yo y mis compañeros hicimos "Agonía" para exponerlo en su clase. En este grupo también tenía un "payasito", pero no contaminaba tanto como los anteriores, realmente vieron los cortos, y creo que fue aquí cuando una muchacha rubia que estaba sentada hasta alfrente estaba en desacuerdo con el hecho que pusiera a los Beatles como instrumento de los cultos. Detrás de mí estaba un jovenque estaba hablando con su compañera, salía y entraba, salía y entraba. Al acabar la exposición se me acerca para decirme que él acababa de hacer un corto y quería que lo viera para aconsejarlo. Yo y el profe Briseño vimos el corto y nos pareció bueno, creativo, pero era un poco mas largo de lo requerido y tal vez ocupaba una mano en cuanto la edición. Ambos le aconsejamos y el joven se retiro contento de haber sido aconsejado.

Aquí nos tomamos un descanso, la alumna organizadora se fue a una clase y el profe Briseño a dar otra clase, asi que no tenía nada que hacer, excepto recordar. Me pasié por toda la escuela y fui a partes memorables de ella, tales como:


Los gallineros...

mi viejo salón arriba de los baños...

el campo de futbol americano...

el teatro...

la alberca...

donde solían estar las mesas afuera de la cafetería...

donde están ahora...

Entre otros lugares. En todos y cada uno de estos lugares (bueno, excepto en éste de arriba) me sucedieron cosas buenas y malas que se han quedado por siempre en mí. Cosas que cambiaron mi forma de ver la vida, de pensar, y de actuar. Y también me recordaron de cosas que debí haber hecho, pero no hice. Ah, memorias.

Pasó el descanso y siguieron más grupos, de aquí en adelante perdí la cuenta de cuantos eran, pero lo que sí se es que no fueron los diez que tenían planeado. El "payasito" dominó más en algunos que en otros, pero para este punto ya me dejó de importar. Durante una de las exposiciones sucedió algo bastante raro: Un joven se quedó a ver "Abuso al Arte" completo, pero cuando comenzó CUARTO se levantó y estaba por irse cuando me vió parado cerca de la puerta y me explica, "Que onda, lo que pasa es que este corto ya lo ví en el cafe revolver". Nos pusimos a platicar del corto al igual que del de Julio que también se presentó en el cafe revolver aquel día. Este joven hizo una observación acerca de CUARTO, me dijo que había notado uno de esos errores que suelen pasar cuando en una toma un personaje sostiene un vaso, por ejemplo, y justo en la siguiente toma ya no lo tiene. Pues algo similar, según el muchacho, pasaba en el final de CUARTO. Lo vímos detalladamente, y tal parecía que sí se llevó a cabo ese tipo de error, ¿entonces por que no lo había notado antes?. "No, no puede ser!", me dije a mi mismo, así que en la siguiente ronda me senté y volví a ver la escena, y descubrí que no había ningún error ya que pasaba tiempo entre ambas tomas y es posible que durante ese tiempo las cosas hayan cambiado.

Recibiendo Diploma en reconocimiento


El último grupo vino acompañado por un maestro bastante joven y, por lo poco que lo traté, bastante accesible. Al igual que como lo hizo el profe Briseño con el primer grupo, este maestro también les habló del cine como referencia antes de comenzar con los cortos y les pidió que analizaran algo: Que muestran y como lo muestran. Durante esta proyección, no estaba presente el profe Briseño, y como con el segundo grupo, Llegó hasta el final, solo que esta vez con un folder en la mano. Cuando se terminó la exposición habló mas profundamente de "Abuso al Arte" dando su punto de vista de lo que significaba el corto, y mientras hablaba ví que dentro del folder tenía un papel que parecía diploma, no estaba seguro. Cuando terminó de analizar el corto me felicita y dice que con autorización del director de la prepa, me da este diploma. Cuando dijo eso, entre dientes dije la frase, "No mames!". Todos los alumnos se dieron cuenta y se rieron, pero no lo dije como verbo hacia el profe, sino lo dije por que no podía creer que me dieran un reconocimiento no solo por exponer mis dos cortos mas recientes, sino por haber presentado "Agonía" hace cinco años atrás. En ese caso, el diploma no sería solo mío, sino tambien de mis compañeros que participaron, entre ellos mis queridas amigas Celeste Contreras y Jazmin Ramirez. Fue un momento muy agradable, pero a la vez sentí como algo dentro de mí desapareció, algo que ha estado en mí por mucho tiempo, y al igual como cuando te separas de alguien con quien has convivido por mucho tiempo, sentí un vacío.

La exposición terminó, le dí las gracias a la alumna que organizó el evento y al profesor Briseño por su apoyo y por haber tenido fe en mí después de muchísimo tiempo. De hecho, me vió en el Frontera con lo del evento del cecut y fue ahí cuando decidió contactarme, tanto él como el profe Morales dijeron algo de mí alfrente de los alumnos que nunca voy a olvidar, "Estoy orgulloso de que haya sido mi alumno".

Adios a la Lázaro

Me fui a mi carro, y mientras se calentaba tomé esta foto, y fue aquí cuando dije las palabras que vienen al principio del post. El vacío que sentí era por que ya cumplí algo que planié hacer por muchísimo tiempo. Recuerdo que a principios del 2003 fui a la Lázaro a hablar con la gente necesaria para realizar una exposición de cortometrajes, pero no se hizo. Eso era algo que quería hacer desde mi tiempo que estaba como estudiante. Y ahora, cuatro años después, se me hizo. La necesidad de exponer mis cortos en esta escuela fue aquello que desapareció cuando ví el diploma que decía"... por exponer sus cortometrajes durante su periodo escolar y en este día". A pesar de que fue algo bueno, me siento triste, yo creo por lo que comenté en aquel post de la exposición del cecut, donde dije que era mejor esperar que recordar.

En cuanto la exposición, pues me fue....mmmm, es dificil definirlo. Los jovenes "payasos" afectaron y contagiaron mucho a los otros alumnos que realmente estaban interesados. Me fue dificil recibir una impresión. Preguntas no me hicieron muchas, pero estas algunas de las pocas que me hicieron:

P. Cuanto tiempo duraste haciéndo los cortos?

R. Con "Abuso al Arte" duré 4 meses y con CUARTO duré mes y medio.

P. Dijiste que grabaste los dialogos de cada personaje por separado, ¿como le hiciste para que pareciera que fue todo una sola conversación?

R. Pues eso ya requiere de la edición. Uno tiene que ser muy preciso y hacer lo posible para que simule que es una sola conversación.

P. En realidad odias a los Beatles?

R. No. El corto no esta diciendo que si te gustan los Beatles eres un culto, lo que dice es que tu comportamiento es lo que te convierte en uno. No se trata de la música o de la ropa que usen, sino de su personalidad.

P. Por que hay tanta sangre?

R. En cual de los dos cortos? (todos rieron).

P. Que te ispiró a realizar estos cortos ?

R. El primero (Abuso al Arte) fue la experiencia que tuve con estos jóvenes durante la prepa. El segundo (CUARTO) fue idea original de un amigo mío, y yo hice una historia en base de esa idea.

Apenas iba a responder esta última pregunta cuando un joven "payasito" contesta por mí diciendo, "Los Beatles!". Lo volteo a ver y le digo, "No, no fueron los Beatles". Estaba a punto de contestarla y de nuevo, el mismo joven contesta, "Charles Manson!", LO volteo a ver de nuevo y le digo, "NO, NO FUE CHARLES MANSON!". Esta vez el joven solo agachó la mirada. Cuando caminaba para el estacionamiento, ahora sí, jóvenes se me quedaban viendo, ahora sí, las miradas de muchos estaban sobre mí.

Me despedí de la Lazaro, sin embargo la volveré a ver ya que se está llevando a cabo un concurso de video, en el cual el profe Briseño me va a invitar con juez. De hecho el joven que nos mostró su corto era por que lo hiba a presentar en el concurso. Para mi es un honor ser parte de este evento, mas que nada por que voy a ver cortometrajes de otros jóvenes tijuanenses, eso es algo que me fascina hacer, asi que voy a regresar a mi querida preparatoria. Tal vez yo ya habré terminado con la escuela, pero la escuela no ha terminado conmigo.

2 comentarios:

Halloween Town dijo...
8:49 p.m.

Si, aunque suene trillado si estudiaste en la lazaro tu vida ya no es la misma, siempre conoces gente que aunque iba en tu misma generacion nunca la viste y resulta q tienen mucha gente en comun, es como una hermandad bizarra, si conoces a alguien y fue a la lazaro empieza la platica amena por mucho tiempo... Saludos a la generacion 99-02

Anónimo dijo...
8:52 p.m.

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