Remembranzas: Dibujando Ando

David Bowie dibujado por José Paredes

El equipo artesanal para hacer cortos esta tan al alcance del consumidor hoy en día que si tuviera 13 años de edad tal vez ya estuviera hacienda cortos, de hecho estoy seguro que ya hay jóvenes de esa edad que están haciendo cosas mas interesantes aun que las que hemos hecho muchos de nosotros. Imagínense cuando lleguen a nuestra edad? Van a ser unos genios. Cuando yo tenía esa edad fue cuando descubrí que quería hacer cine, pero como el equipo en aquel entonces era inalcanzable entonces hice la siguiente cosa más cercana: Hacer comics.

El saber dibujar es un don que yo y mis tres hermanos hasta este día tenemos, las caras de los monos son iguales ya que desarrollamos un estilo muy similar al de los fannies de Archie, pero aun así cada quien tenemos algo que distingue nuestro estilo.

Juan Carlos Paredes Ríos

Mi hermano mayor, Juan “Orlok” Carlos comenzó hacer comics como a los 9 años. No le importaba mucho ser original en cuestión de historia ya que hizo uno en donde adaptó la de “Fright Night” solo que poniéndonos a nosotros tres de protagonistas. Fue desde ahí que surgió la costumbre de hacer comics en donde nosotros mismos seriamos los protagonistas. Debido a que solo era un año menor que Juan Carlos, no tardó mucho mi hermano Marco en continuar haciendo comics. Yo teniendo 5 años y viendo lo que mis hermanos hacían, comencé a dibujar a una edad muy temprana a la de ellos. Cuando Juan C. llego a la secundaria comenzó a satirizar todo lo que sucedía durante sus años de secundaria en la “Poli” haciendo varias mini historietas llamadas “La Cabaca”.

Marco Antonio Paredes Ríos

Marco nunca fue fanático de lo sátiro, sino de la Ciencia Ficción. Por lo cual hizo varios comics que incluían al “Terminator”, al “Predator” y a los “Aliens”. Ambos yendo al mismo tiempo a la secundaria se hicieron populares por sus dibujos.

Al llegar a la preparatoria Juan C. se desprendió por completo de los comics ya que descubrió su verdadera pasión: La música.

Karla Martinez maquillando a la actriz de "Flor de Nopal"

Fun Fact: En la prepa tuvo una clase sobre cine encabezada por Karla Martinez, integrante de 5 y 10 que dirigió "Despedida en Tono Menor".

Lo mismo pasó con Marco, pero con el fue lo contrario ya que a pesar de haber sido en sus años de prepa cuando descubrió su pasión como baterista, también en esta etapa hizo su comic mas memorable, el cual fue una combinación de “Reservoir Dogs” con “Pulp Fiction”. El comic fue titulado “Punk Fiction”.

Mientras tanto yo andaba en mis últimos años de primaria, y también era popular por mis comics. Recuerdo que era en 5to cuando todos los días llegando se me acercaban mis amigos para ver lo que le había adelantado aun comic llamado “Dark Mask 2” (La primera parte no fue tan popular), el cual trataba de una infantil pero excesivamente sangrienta y violenta lucha entre el bien y el mal. Como todo niño en aquel tiempo, era fanático tanto de “Street Fighter” como de “Mortal Kombat”, así que ocasionalmente dibujaba a los personajes en la parte de hasta atrás de mi cuaderno. La hija del director iba conmigo, y en una ocasión llego a la mitad del proceso de cuando dibujaba a Chun-Li, quien como todos sabemos tenia un cuerpazo, entonces al ver cuando le dibujaba los senos y al ver que alrededor había dibujos de los otros personajes hombres que, como todos sabemos, nunca tenían camisa (Johnny Cage, Liu Kang, Sagat, Vega, etc.), pensó que me estaba pervirtiendo a mi mismo con dibujos obscenos. Y adivinen lo que hizo? Sí, lo adivinaron, me acusó con su Papá. La Primaria era Católica, así que se puso la cosa, tan seria que mandaron llamar a mi Papá diciéndole que dibujaba a puros desnudos. Lo bueno que mi Papá ya sabía que onda conmigo, así que cuando el director estaba hablando con él hizo lo mismo que hizo durante la presentación de “Séptimo en la Frontera” en la Casa de la Cultura, solo estaba viendo el reloj para ya irse.

Pasé a la Secu, a la “Poli” también, e igualmente me hice famosillo por mis dibujos, solo que yo era un nerdo… bueno, en realidad estaba entre los nerdos y los cool, pero el punto era que me esforzaba al dibujar para impresionar a los cool y pertenecer, nunca funcionó del todo. Así que me tomé la libertad de hacer lo mismo que hizo mi hermano Juan C. en la secu, satirizar lo que me sucedía, solo que yo revelaba demasiado. En un party un amigo quiso drogar a una amiga echándole una pastilla de éxtasis a su trago, cuando me di cuenta tiré el trago salvando a mi amiga. Semanas después hice un comic sobre esa fiesta y puse eso. Al leerlo todas mis amigas se quedaron con la boca abierta y por mas que me hayan querido persuadir no les revele quien y a quien quería drogar. Otra cosa que revelaban mis comics era quien me gustaba, todos ya sabían, pero mis comics lo resaltaban más aun.

Llegó la Prepa. Seguí haciendo comics, la mayoría de acción absurda pero con una buena cantidad de diálogo. A pesar de que hacia peliculitas absurdas con mis amigos por las noches era en los comics donde realmente lidiaba y practicaba lo narrativo. El mas aventado que hice se llamaba “Crowds” donde combiné vampiros, zombies, acción y gothic rock. Era aproximadamente 200 hojas de largo, lo llegué a llamar “Mi Biblia” ya que nunca había hecho y nunca hice un comic tan largo. Aquí experimenté con diferentes tipos de lápices para crear paisajes similares a los de “Sleepy Hollow” de Tim Burton, pero no fue hasta las ultimas cien hojas donde los paisajes realmente me salieran ya que en las primeras cien parecía claramente que estaba experimentando.

Después de este comic mi interés por seguir dibujando se desvaneció por completo ya que hice mi primer corto preparatoriano llamado “Agonía” y a los dos meses comencé a hacer “Un Dicho Aprobado”. A pesar de la intensa joda que me aventé siendo un joven de 17 años sin cámara, sin equipo de edición, y sin dinero, la realidad era que ya podía hacer cortos, ya podía contar historias a través del medio que realmente me apasionaba. Los comics me encantaban, pero la realidad era que cada vez que hacían un cuadrito en realidad estaba practicando un encuadre. Todas las tomas que anhelaba hacer las hacía por medio de los comics, no satisfacían por completo mi deseo de realizarlas con una cámara, pero ayudaban muchísimo. Aún así, después de acabar el Dicho me eché un último comic sobre mis choco aventuras en Hermosillo, Sonora. En este nuevamente expresé quien me gustaba, quien me caía mal, quien me caía bien, y que pensaba de mis amigos. La critica que recibí fue, “revelaste demasiado”. Después de ese comic, se acabó.

Lo benéfico de los comics era que uno podía hacer la historia que uno quisiera sin importar la dimensión ya que obviamente tú la creabas. Podía hacer masacres, podía hacer interminables escenas de acción, podía mostrar perspectivas imposibles de mostrar en el cine. También uno podía crear mundos inalcanzables, lo cual se esta incorporando apenas poco a poco en el cine local con artistas como el Zendejas o Marcio Moreno, y muchos otros animadores que se encuentran en la ciudad. Sin duda alguna esto ayudo a desarrollarme en cuestión de tomas aunque parezca que no las selecciono ni las planeo. He descubierto que no soy el único que hizo comics antes de hacer cortos, tengo entendido que el mismísimo Zendejas también dibujaba, solo que a diferencia de mi, él lo incorporo mas vividamente a su pasión de hacer cine, lo cual le ha funcionado muy bien.

Inspirado por Spielberg desde entonces!

Extraño hacer comics debo admitir, extraño crear las locaciones, los personajes, y los conflictos en el papel. Todos me dicen que es mejor tener un asistente de dirección quien se encarga de organizar todo para que tu nomás llegues a grabar, tal vez sí, una ayuda no me caería mal, pero la verdad es que nunca llegaría solo a grabar, sino estaría junto con él creando la locación que había visionado como siempre estuve acostumbrado a hacer.