La navidad es una época
muy emocional para mí, pero no de una manera negativa. Es mi época favorita del
año a excepción de la mayoría de ustedes que adoran Halloween de manera
incondicional. En cuanto la cinematografía siempre ha tenido una particular
sensación, y lo ha tenido durante varios años ya que es casi el final del año,
y miro atrás viendo que fue lo que hice este año y que tanto progresé como
cineasta. Pero un detalle curioso que regularmente siempre ha existido durante
estos días es que siempre tengo un proyecto en el cual estoy trabajando.
Supongo que todo empezó
el 7 de Diciembre del 2001 cuando en la prepa dirigí un proyecto que hicimos
entre varios del salón llamado "Agonía". Ese momento fue
crucial para mi formación como cineasta ya que fue ahí cuando por primera vez
realmente dirigí un proyecto con el equipo que, en aquel entonces, era de los
mejores (Adobe Premier 6.0).
Para Diciembre del 2002
ya había dirigido mi segundo proyecto llamado "Un DichoAprobado", el cual estaba sin terminar por falta de equipo para
la post-producción. Todo cambió cuando el día 12 de este mes (Día de la Virgen)
conseguí el Adobe Premier 6.0 gracias a un compañero de preparatoria, y debido
a eso pude acabar mi proyecto meses después.
En Diciembre del 2003
estaba realizando mi siguiente corto llamado "Abuso al Arte" y fue en
estas fechas cuando grabé una escena en la que el protagonista (Interpretado
por Oscar Camacho) camina por distintas áreas de la ciudad.
El Diciembre del 2004
llegó, y a diferencia de los últimos tres años, llegó sin tenerme atado a
ningún corto ya que "Abuso.." estaba terminado y no tenía aún nada en
mente por realizar.
Los siguientes dos
Diciembres (2005 y 2006) fueron idénticos ya que en ambos años hice un
cortometraje durante los veranos y a fin de año me enfrentaba con las
post-producciones de ambos. A finales del 2005 estaba trabajando con CUARTO (De
echo mis papás me regalaron bocinas nuevas para mi PC), y cuando el año terminó
aún habían muchos problemas técnicos por resolver. En cambio en el 2006 estaba trabajando
con "Cenizas Quedan", y recuerdo claramente que el 31 de
Diciembre lo acabé definitivamente sin ninguna complicación.
En Diciembre del 2007
estaba trabajando en mi documental "Séptimo en la Frontera". Recuerdo
haber llevado a Alberto Gutiérrez de 5y10 a mi casa para
entrevistarlo, y mi casa estaba totalmente decorada para la temporada. Me
parece que Alberto hizo la observación al respecto ya que mis papás decoran la
casa como si fuera winter wonderland!
Al igual que el 2004,
Diciembre del 2008 la pasé relajadamente ya que no tenía ningún proyecto en
manos, aunque ya estaba planeando mi siguiente largometraje de ficción que
comenzaría a grabar el verano quentra.
Los últimos tres años,
2009, 2010, y 2011, cerré el año con "BUENOS TIEMPOS" en las manos. En Diciembre del 2009 había suspendido el rodaje
porque me quedé sin trabajo (El último día de rodaje fue en casa de Álvaro
Zendejas). El 2010 lo concluí sin avanzar mucho en el proyecto debido a que mi
mayor enfoque fue dedicado a mi boda. Y en estas fechas el año pasado, 2011, lo
concluí con una gran esperanza de que este año estrenaría el largometraje ya
que (a) Álvaro Zendejas consiguió mejor equipo para darle avance, y (b) Manuel
Alejandro Anell de El Vigilante Studios se unió al proceso de
post-producción y ayudó a acelerar el proceso.
Este Diciembre ha llegado
(2012), y, por tercera ocasión desde que comencé mi humilde trayectoria como
cineasta, me encuentro sin un proyecto en manos, así que puedo disfrutar estos
días festivos de manera más relajada y sin ningún compromiso. Aunque bueno, el
año quentra tengo que comenzar con la movilización del largometraje.
Esa sensación que siento
en estas fechas tal vez se debe a que me regresa a aquel Diciembre del 2001
cuando todo comenzó para mí. Supongo que en cierta forma estoy celebrando el
aniversario de ello, el cual este sería el 11avo aniversario. En ese entonces lo único que anhelaba era ser
cineasta y que algún día pudiera hacer mi película. Ahora, 11 años después de
aquel primer paso, puedo volver al pasado y decirla a aquel jóven de 17 años
que todo va estar bien y que algún día lo logrará. Todo esto acompañado con el
toque fascinante y armonioso de las fiestas navideñas.